La verdad es que tienes razón, pero sabes que pasa...
Por un lado, el colectivo docente, está desde siempre muy pasota de todo en general, cada uno barre para su casa, y no hay unión. No lo digo yo, es la realidad que vivimos desde ni se sabe; cuando hay huelgas acuden 4 gatos, y cuando hay que sacar un tema a poner en la mesa, cada uno mira para su lado y si no le afecta... nadie mueve ficha.
A eso súmale, que si hablas con algún inspector o algo, más de una vez me han soltado tres frases:
1º.- Nadie te obliga a trabajar en esto, si te has metido en este mundillo ya sabes lo que hay
2º.- Un docente debería vivir en la localidad donde trabaja; si vives a una hora ese es un problema que solo te afecta a ti, si tanto gasto te es, quédate en el municipio del centro que esa sería la obligación.
3º.- Muchas profesiones se desplazan a su lugar de trabajo en coche y todos lo hacen.
( Todo esto me lo han dicho varias veces algún inspector o similares).
Con lo cual, lo que pides tienes razón, pero hoy en día no es viable porque aunque todos lo pensamos, veo imposible sacar adelante lo que propones, más cuando la desunión del gremio docente.
Totalmente de acuerdo en todo lo que dices, el problema es que somos un colectivo de mierda, que ni es colectivo ni nada, llevan años creando intereses aparcelados y les ha salido genial. No nos movilizamos por lo que afecta a todos es evidente que menos por lo que afecta a una parte.
Respecto a que nadie nos defiende, si bien es cierto que los sindicatos nos defienden fatal y que en la mayoría de los casos son sindicatos verticales del lado que les toca y todos ellos estómagos agradeciddos, también lo es que tenemos lo que merecemos, cada vez que se han propuesto movilizaciones serias (la huelga es la única efectiva) ha sido un fracaso por culpa nuestra. Y no me vale decir que es que tiene que ser indefinida, que un día no vale para nada y mamonadas varias de los jetas que no la secundan con excusas, si fracasa la de un día con que mínimo de esperanza se convoca una más larga.
Conclusión: tenemos lo que merecemos, por bocachanclas en los pasillos que son incapaces de nada más que quejarse.
Respecto a las respuestas del inspector hay que empezar a hablar clarito y sin miedos y en algunos casos a ser un poquito menos educado con según que jetas que suelen actuar de policía política en lugar de intentar ayudar a solucionar los problemas. Que somos el funcionariado más vapuleado del país, cuidado que a los jetas (que haberlos haylos los dejan tranquilitos).