Hace poco fue el día de la mujer trabajadora.
Con el circo del Papa, el Vatilix, las violaciones, la corrupción, los temas actuales como la coeducación, igualdad de derechos, la lucha de las mujeres, el progreso...
Me pregunto, ¿cómo es posible que las mujeres sigan asistiendo a la Iglesia, defendiéndola a capa y espada, y creyendo en una institución falsa y corrupta?
El trato más vejatorio que reciben las mujeres lo reciben de la Iglesia a lo largo de toda la historia. ¿Nadie lo ve?
Vas a misa, una boda, y te suelta un cura, o PACO en sus primeros discursos, que las mujeres para trabajar en la casa y apoyar moralmente al marido. Las mujeres fuera del poder. Las mujeres no pueden dar misa. Las mujeres todas juntitas en un edificio aparte. Las mujeres a rezar y cocinar.
Y luego te dicen que el matrimonio homosexual es un peligro para la procreación humana y un obstáculo para la natalidad. Vaya chorrada. ¿Y el celibato?
Y el caso de los niños/as lo dejamos aparte por sus rasgos de asquerosidad, repugnancia, enfermedad mental, involución humana y cualquier expresión que podamos utilizar.