La triste realidad...
El colegio de Fuentecillas, la única dotación educativa pública de nueva construcción en la capital y la provincia, abrió ayer sus puertas sin contar con todo el profesorado y sin servicio de comedor.
La Dirección Provincial de Educación apuró hasta el último minuto para realizar los contratos a los interinos y así no pagarles desde el 1 de septiembre, fecha de incorporación de las plantillas a los centros educativos.
Las plazas estaban adjudicadas desde el día 4 de septiembre, pero alguno de los docentes no acudió hasta ayer a firmar el contrato al residir en otra provincia. Cuando llegaron a las dependencias de la Junta se encontraron con largas colas para hacer el trámite y se incorporaron al colegio más de una hora después de que se iniciaran las clases.
La situación fue más grave en el caso de los alumnos de primero de Infantil (3 años) que durante estos primeros días están en periodo de adaptación y únicamente acuden a clase una hora y media. Los padres y madres se encontraron ayer con la sorpresa de que no había profesores cuando llevaron a sus hijos a las 9.30. Los profesores llegaron prácticamente a la hora de la salida. Lógicamente, la situación quedará hoy solventada con la incorporación de toda la plantilla.
Desde Educación se enmarcó este incidente dentro de las complejidad que supone la adjudicación de vacantes al tratarse de una lista regional, mientras que desde la FAPA se achacó la situación a la «descoordinación» de la administración. El colegio de Fuentecillas contará con 15 docentes, de los que 10 son interinos y 5 han llegado en comisión de servicios.
Otra de las carencias del nuevo centro educativo es el servicio de comedor. No funcionará hasta el 1 de octubre, lo que ha provocado alguna que otra incomodidad a las familias. El horario lectivo de este mes de septiembre es de 9 a 13 y muchos padres y madres no pueden acudir a buscar a sus hijos o hijas a esa hora, situación que se solucionaría con el comedor.
Sin embargo, el equipo directivo se ha comprometido a atender a los alumnos hasta las 14 horas durante los próximos tres días para que los padres tengan tiempo de buscar alternativas.
Por su parte, el director provincial de Educación, Juan Carlos Rodríguez Santillana, aseguró que las familias ya sabían que en septiembre no se prestaría el servicio de comedor. Al parecer, se ha retrasado su apertura como medida de precaución al ser imposible abrirlo con las debidas garantías. «Se acaba de dar de alta la electricidad y es necesario comprobar el buen funcionamiento de las cámaras frigoríficas y los hornos y hemos preferido retrasar su apertura en aras de la seguridad porque los alimentos llegan refrigerados y hay que calentarlos», indicó.
Satisfacción
Las familias de Fuentecillas y San Pedro de la Fuente que llevan muchos años esperando esta dotación educativa y ayer se mostraron satisfechas con el resultado. La dirección del centro les permitió conocer el aula en la que estudiarán sus hijos y en los próximos días se celebrará una reunión. Todo el mobiliario está instalado, aunque falta dotar al centro con libros y materiales didácticos, carencias que se irán completando próximamente.
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