Pues lee los comentarios que hicieron en su momento quienes ahora tanta simpatía demuestran por la ministra italiana:
Se valiente dimite y al monte, joder y menos lagrimas
No se desconsuele usted tanto mujer ... que ya verá lo que se va a desconsolar cuando los culpables de esta crísis acaben delante de los tribunales!!!
venga ... llore usted como una plañidera pidiendo "resignación" ... y proclamando que no hay nada que hacer ... y venga, deles de comer a sus "medios" para propagar el mensaje!!!
... y los mercados
... bien gracias, a esos no les recortamos!!
En realidad esta mujer está llorando de felicidad porque es consciente de lo que le tenía que haber pasado por culpable de la situación y en vez de eso está diciéndole a los italianos que toca trabajar mas, en peores condiciones y por menos dinero y cuando acabe se va a ir de rositas para su casita!!
Esta sra tiene menos veguenza que la puerta de la calle.
Que se vaya al teatro
¡MENUDAS LÁGRIMAS DE COCODRILO! ¿Pero cómo no se les cae la cara de vergüenza de reirse tan descaradamente de nosotros?
Cara dura tiene mas cara que espaldas, esa plañidera . . . . .
Si le hubieran dado allí mismo un par de jostias bien dadas, a lo mejor hubiera llorado sinceramente.